Palabras de Elizabeth, hermana de Raul Eduardo, en el primer aniversario de Renacer El Salvador

FELIZ PRIMER ANIVERSARIO “RENACER” LO QUE ME INSPIRÓ RENACER Muy buenas noches mamás y papás, hermanos y amigos de nuestro grupo RENACER. Debo aclarar que llegué a Renacer como acompañante de mis padres. Es decir fue la partida de nuestro Raúl Eduardo, que nos guió de la mano aquí. Precisamente supimos del grupo, a los cuarenta días de este acontecimiento. Cuando Mauricio me solicitó, intervenir en este evento de aniversario, de inmediato le dije sí. Aunque posteriormente reflexioné que yo no era la “mamá”, y que como me dirigiría a ustedes ¿Qué puedo decirles a ustedes, los papás y mamás que van volando a gran altura de este nuevo camino, en el que una hija o hijo se bajó ya en el fin de su propia estación?. Sin embargo, también he aprendido mucho de este dolor que la separación por la muerte nos ha dado, cuando venimos todos y todas al grupo hemos podido sentirnos identificados y “hermanados” con nuestros padres, esposas, hijos, amigos y demás hermanos que hemos perdido a esos valiosos seres queridos, “hermanados” repito en el amor común, en la nostalgia ya de los dulces recuerdos de todo lo dicho y compartido junto a ellos. Es maravilloso, cómo nuestro lenguaje aquí se transformó en cuanto a una nueva forma de sentir y comprender a nuestros hijos y hermanos. Dejamos de ver a Raúl, Rafa, Miriam Astrid, Lino, Federico, Ivania, Romeo, Alexia como un individuo, aprendiendo a identificarlos como “ELLOS”, quienes ya volaron, ya se nos adelantaron, en un sentido de TRASCENDENCIA hacia lo que todos llegaremos algún día: “traspasaron el umbral” . Al llegar a RENACER, a muchos nos costó o nos fue más fácil comenzar a hablar, pero precisamente escuchando, conocimos las experiencias que cada papá y mamá vivió antes de esas partidas; lo cuál nos ha trasmitido sentimientos mutuos de compasión, admiración, sorpresa y solidaridad hacia todos los otros padres que sufren o sufrieron la pérdida de un hijo o hija. En otras palabras, hemos podido descentrar nuestro dolor propio pensando en el de los demás. Aquí en el grupo, hemos tenido la libertad de expresar, sin miedo al reproche las más tristes expresiones y temores, pues las lágrimas y el dolor al ser compartido, cuenta con las palmaditas del que está más cerca de cada uno de nosotros. Hemos descubierto una nueva área de lecturas, acerca de cómo estar mejor cada día, . Nuestra cita semanal ha conllevado guiarnos con selecciones diversas acerca de la pèrdida y el duelo, temas que antes eran lejanos o diferentes para cada uno. Algunas veces la proyección de una película, cuyas imágenes nos han removido sentimientos y nos han provocado precisamente “sacar de adentro” lo que pensábamos muy oculto. También de esta manera hemos comprendido como este dolor de la pérdida repentina e inesperada de un hijo o hija, ya estaba presente en muchos hogares. Y agradecemos entonces el tiempo invertido de esos escritores, que trascendieron a través de su experiencia para facilitarnos a otros la comprensión y ayuda de este hecho en nuestras vidas Hemos debido comprender que la muerte siempre es nuestra fiel compañera de viaje, y que de la manera que sea los tiempos de ELLOS, nuestros seres amados, habían sido ya cumplidos. Se encontraban ya listos para VOLAR DE REGRESO A CASA, Muchos de ustedes padres o madres expresaron que deseaban irse con ellos. La vida parecía imposible……al revés. Y sin embargo ustedes ESTÁN AQUÍ, rindiendo homenaje día a día a vuestros hijos, nuestros hermanos… Admiro a cada uno de ustedes, por el impulso diario para salir de la cama desde aquellos primeros días y para responder a la pregunta que la vida les hacía. Por no dejarse vencer, pues aunque algunos supimos del grupo RENACER transcurridos ya muchos días, practicaron el SÍ A LA VIDA, A PESAR DE TODO realizando las tareas cotidianas de todos los días. Algo tan pesado por dentro….. pero no los detuvo y aquí están. Todos ustedes mamás y papás, asì como sus “acompañantes” venimos aprendiendo a vivir sin ellos, pero llevándolos eternamente en nuestro propio ser y emociones más íntimas. Pareciera que tenemos un altar especial para cada uno de ellos ahora. Todo eso va transcurriendo. Finalmente pienso que gracias a RENACER de El Salvador aunque se funda en el dolor de esos padres pioneros Mauricio y Gaby, hace posible que las vidas de nuevos padres dolientes recobren nuevamente otro sentido, otro brillo, otros proyecto otro RENACER, también personal e individual haciendo posible para muchos volver a sonreír felices y sin remordimientos hacia los que ya no están, pues también rescatamos ese derecho. Infinitas gracias Mauricio y Gaby y por supuesto las estrellitas fugaces que nos guiaron de la mano hasta aquí, Rafita, Raùl Eduardo, Federico, Miriam Astrid, Lino.. Felicidades RENACER, de El Salvador. 26 de enero 2010 (Hilda Elizabeth Miranda Luna, hermana de Raúl Eduardo y de Sonita)

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